La NFL está por cerrar su temporada número 100 y en New Era estamos empezando nuestro centenario. Han sido incontables tacleadas, anotaciones, celebraciones que hemos presenciado desde las laterales, gradas y cientos de lugares donde hay una reunión de aficionados, pues junto al escudo de tu equipo, está la bandera de New Era.

En este 2020 se celebra nuestro cumpleaños 100. Hemos pasado de crear las famosas boinas Gatsby, al béisbol de las Grandes Ligas, a los deportes más importantes alrededor del mundo. El futbol americano forma parte de nuestro legado, pues desde 2012 somos la gorra oficial de la NFL.Ahora, año con año estamos acompañando cada jugada  desde la patada inaugural, hasta que el campeón levanta el Vince Lombardi.

Para conmemorar este tiempo que hemos estado en la cabeza de todo jugador y aficionado de la NFL, te presentamos los 7 mejores momentos de los últimos 7 Super Bowls.

La primera gorra de campeón

 

La primera vez que New Era formó parte de las celebraciones del campeón del Super Bowl fue en la campaña 2012-2013, en la edición XLVII, cuando los Baltimore Ravens se coronaron luego de ganar un partido dramático a los San Francisco 49ers, 34-31.

Nada mal para comenzar, pues aquel fue el último partido de uno de los jugadores más icónicos de la NFL, Ray Lewis, quien consiguió su segundo Super Bowl con los Cuervos. Y cómo olvidar uno de los momentos más curiosos en la historia de los Súper Tazones, cuando en el tercer cuarto ocurrió un apagón parcial en el estadio. Reflectores y pantallas se apagaron por una falla en el sistema eléctrico del domo de Nueva Orleans, suspendiendo el juego por 34 minutos. Ahora el partido también es conocido como el Blackout Bowl.

El primero de Nueva York

El Super Bowl XLVIII fue el primero en celebrarse en la Ciudad de Nueva York, una de las urbes más importantes del mundo. El tradicional y gélido clima de "La ciudad que nunca duerme" amenazaba el juego que hasta ese entonces se procuraba celebrar en ciudades con un ambiente más cálido. Pero la madre naturaleza dejó jugar en paz a los Denver Broncos y Seattle Seahawks.

El partido terminó en paliza 43-8 con una dominante actuación de la defensa de los Seahawks y su famosa "Legión del Boom". Sin duda uno de los momentos más memorables fue al abrir la segunda mitad, cuando el receptor Percy Harvin regresó la patada inicial 87 yardas a touchdown, con lo que Seattle prácticamente dejó sin oportunidad a Denver de regresar al partido.

La intercepción más famosa

10 años desde su último campeonato, los Patriotas lograron su cuarto título en la edición XLIX del Super Bowl y lo hicieron de forma dramática con una de las más inverosímiles jugadas.

Los Patriotas ganaban 28-24 y al reloj de juego sólo le quedaban 26 segundos. Seattle, quienes tenían a Marshawn Lynch, uno de los corredores más potentes de la liga, sólo necesitaban avanzar una yarda para anotar y llevarse su segundo Super Bowl. Pero en una de las jugadas más cuestionables de todos los tiempos, los Seahawks decidieron lanzar el balón, y de forma milagrosa el novato Malcom Butler interceptó para cerrar el cuarto título de la dinastía Brady-Belichick.

El adiós de Manning y la gran defensa de Denver

Luego de perder dos Super Bowls, Peyton Manning regresaba al partido grande para decir adiós. El escenario no podía ser mayor, pues era el Super Bowl 50, y detrás de él estaba una de las defensas más dominantes, con uno de los caza cabezas más espectaculares de los últimos años, Von Miller.

Gracias a una estupenda actuación de la defensa de los Denver Broncos, Manning consiguió su segundo anillo de Super Bowl al derrotar a los Carolina Panthers. En retrospectiva, se ha vuelto ya casi legendaria la imagen de Von Miller capturando a Cam Newton, zafándole el balón para los primeros seis puntos de la victoria 24-10 del equipo de Denver.

 

El primer tiempo extra 

Tom Brady no inició la temporada de Super Bowl LI por una suspensión de la liga, y a lo largo del año rondaron dudas de su nivel de juego a sus 40 años. Pero todo debate fue callado con el regreso más grande en la historia de los partidos de campeonato.

 

Perdiendo 28-3 en el tercer cuarto, Brady y compañía comenzaron a edificar el regreso más improbable, para culminarlo en tiempo extra con un marcador final de 34-28. Con la victoria, Brady se convirtió en el quarterback con más anillos de Super Bowl.

La recepción de Julian Edelman, en medio de tres jugadores de los Atlanta Falcons, y a centímetros del suelo, es sin duda una de las imágenes que más recuerdan los aficionados a los Pats, y una pesadilla para los Falcons.

 

El primero de los Eagles

La edición LII, es posiblemente el único Super Bowl en que una de las recepciones más importantes fue realizada por el quarterback. El juego entre los Philadelphia Eagles y los New England Patriots terminaría con la cantidad de yardas más alta en Super Bowls (1,151), con un marcador de 41-33, y con el Trofeo Vince Lombardi por primera vez en manos de la franquicia de Philadelphia.

 

En un juego con tantos puntos, es difícil pensar que una anotación en el primer cuarto fue decisiva, pero cuando tu quarterback suplente es quien atrapa el ovoide tras una jugada de engaño sacada de un laboratorio, todo es posible, incluso que Nick Foles le haya ganado un tiroteo a Tom Brady para llevarse el premio al Jugador Más Valioso (MVP).

La útlima conexión Brady-Gronk

En el Super Bowl con menos puntos anotados, la jugada clave fue la recepción de un ala cerrada, uno de los mejores de la historia.

Corría el cuarto cuarto sin ningún tochdown en el marcador, cuando los Patriotas armaron la única ofensiva anotadora del juego. La anotación sería una corrida de Sonny Michel de dos yardas, pero antes, Tom Brady había lanzado un pase quirúrgico de 29 yardas a su ala cerrada Rob Gronkowski, para una de las recepciones más importantes de su ilustre carrera.

Esa jugada sería la última gran conexión entre Brady y Gronk, ya que después de ganar el Super Bowl LIII, 13-3 a Los Ángeles Rams (el sexto de los Pats), el gran ala cerrada anunciaría su retiro.

100 años llenos de gorras, de historia, y no podemos esperar a ver qué otros espectaculares momentos grabaremos en la memoria junto a aficionados de la NFL y de todo deporte en el que New Era está presente.

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